Todas las calles de ‘La Hermosa Provincia’ tienen nombres bíblicos y en la práctica el sitio funciona como una ciudad en miniatura. Unas 5,000 personas residen allí, según cifras oficiales.
El asentamiento alberga escuelas, oficinas del Registro Civil, del servicio postal, farmacia, un centro cultural, un mercado. Han pasado más de 70 años desde su fundación. Sin embargo, para algunos habitantes de Guadalajara, ‘La Hermosa Provincia’ no parece formar parte de la misma ciudad. “Aunque vivo en Guadalajara y soy de Guadalajara, allí era como entrar a otro lugar, con otro paisaje, con otras formas de vestir, con elementos de costumbres distintas y sobre todo donde la iglesia, el templo y la actividad religiosa estaba totalmente en el centro de la vida de sus habitantes”, dijo Renée De la Torre, doctora en Ciencias Sociales y estudiosa de La Luz del Mundo.